La importancia de la exposición en la fotografía

Cuando comienzas en el mundo de la fotografía, uno de los primeros conceptos que necesitas entender es la exposición. La exposición es la cantidad de luz que llega al sensor de la cámara durante el proceso de captura de una imagen. Controlar la exposición de tus fotos no solo te permite obtener imágenes correctamente iluminadas, sino que también te da la oportunidad de ser creativo, manipulando la luz para obtener efectos únicos.

En este artículo, te explicaremos qué es la exposición, los tres factores que la afectan y cómo puedes ajustar estos parámetros para mejorar tus fotos.

La exposición en fotografía es el proceso por el cual se captura la luz. Si la exposición es correcta, la imagen será nítida, con colores vibrantes y un buen rango de detalles en las sombras y luces. Sin embargo, si la exposición es incorrecta, la imagen puede quedar sobreexpuesta (demasiado brillante) o subexpuesta (demasiado oscura).

Los tres pilares de la exposición: Apertura, Velocidad de obturación e ISO

Existen tres componentes principales que controlan la exposición en fotografía:

1. Apertura (f/stop)
• La apertura es el tamaño del diafragma de la lente, es decir, el orificio a través del cual pasa la luz. Se mide en números f (por ejemplo, f/2.8, f/5.6, f/11, etc.). Cuanto menor sea el número f (como f/2.8), más grande será el diafragma y, por lo tanto, entrará más luz. Esto también crea un efecto de fondo desenfocado (bokeh) que es muy popular en retratos.
• Consejo: Si necesitas capturar más luz en situaciones de poca iluminación o crear un fondo borroso, utiliza una apertura más amplia (f/2.8 o f/4).

2. Velocidad de obturación (Shutter Speed):
• La velocidad de obturación determina el tiempo que el obturador de la cámara permanece abierto para permitir que entre la luz. Se mide en fracciones de segundo, como 1/500, 1/250, 1/30, etc. Cuanto más rápida sea la velocidad de obturación (por ejemplo, 1/1000), menos tiempo habrá para que entre luz, y la imagen será más nítida. Por otro lado, con una velocidad de obturación lenta (por ejemplo, 1/30), se captura más luz y es posible que se vean efectos de movimiento, como el desenfoque de acción.
• Consejo: Si estás capturando sujetos en movimiento (como deportes o animales), utiliza una velocidad de obturación rápida para evitar el desenfoque de movimiento. Si deseas capturar la suavidad del agua en movimiento, como cascadas o ríos, usa una velocidad de obturación más lenta.

3. ISO:
• El ISO determina la sensibilidad del sensor de la cámara a la luz. En configuraciones bajas (ISO 100 o 200), la cámara necesita más luz para producir una imagen correctamente expuesta, pero las imágenes serán más nítidas y menos ruidosas. A medida que aumentas el ISO (por ejemplo, ISO 1600, 3200 o más), la cámara puede capturar imágenes con menos luz, pero el ruido digital (grano en la foto) aumenta.

Consejo: Mantén el ISO lo más bajo posible para evitar el ruido. Solo aumenta el ISO cuando las condiciones de iluminación sean muy bajas.

La “exposición correcta” no es una sola configuración, sino un equilibrio entre los tres factores: apertura, velocidad de obturación e ISO. A menudo, los fotógrafos deben hacer sacrificios entre ellos. Por ejemplo, si decides utilizar una apertura más grande (f/2.8) para capturar más luz, es posible que necesites reducir la velocidad de obturación o bajar el ISO para evitar que la imagen quede sobreexpuesta.

Aquí te mostramos cómo puedes ajustar estos tres parámetros en diferentes situaciones:

  • Situación 1: Fotografía en condiciones de poca luz (interiores o de noche):
  • Solución: Abre la apertura (utiliza un número f bajo, como f/2.8) para dejar entrar más luz. Si es necesario, aumenta el ISO para capturar más luz sin perder calidad. Mantén una velocidad de obturación moderada para evitar el desenfoque por movimiento.
  • Situación 2: Fotografía de acción rápida (deportes o niños corriendo):
  • Solución: Usa una velocidad de obturación rápida (por ejemplo, 1/1000) para congelar el movimiento. Si la luz es suficiente, baja el ISO para evitar ruido. Es posible que necesites usar una apertura más pequeña (número f alto, como f/8) si la luz es abundante.
  • Situación 3: Fotografía de paisajes con luz natural:
  • Solución: Usa una velocidad de obturación lenta (1/60 o 1/30) para capturar más luz y una apertura moderada (f/8 o f/11) para obtener más profundidad de campo. Mantén el ISO bajo (100 o 200) para evitar ruido en los detalles de la imagen.

Las cámaras modernas vienen con un medidor de exposición en el visor o en la pantalla LCD. Este medidor muestra si la exposición es correcta, sobreexpuesta o subexpuesta. La mayoría de las cámaras te permiten ajustar la exposición manualmente para obtener el resultado deseado. Además, muchas cámaras tienen un modo de exposición automática que ajusta los parámetros por ti, pero tener un buen conocimiento de cómo funciona la exposición te permitirá tener un mayor control creativo sobre tus fotos.

Entender la exposición es crucial para obtener fotos de calidad. Cada uno de los tres factores (apertura, velocidad de obturación e ISO) afecta la cantidad de luz que entra en la cámara y, por ende, la forma en que se ve tu imagen. Aprender a manipular estos parámetros de forma creativa y técnica te permitirá tomar mejores fotos en cualquier situación.

La práctica es clave, así que no dudes en experimentar con diferentes combinaciones de apertura, velocidad y ISO para encontrar el estilo que más te guste. A medida que ganes confianza, notarás una mejora significativa en la calidad de tus fotos.

Consejo adicional: Si deseas aprender más sobre fotografía, sigue nuestro blog para recibir más consejos cada semana sobre cómo mejorar tu técnica.

Scroll to Top